A esta altura ya todo el mundo sabe que las ganancias extraordinarias que prometen estos chantas como el Colorado Ponzi o el mismo Leonardo Cositorto no son otra cosa que estafas y que los únicos que se enriquecen son los que las publicitan.

Por eso es que en 'Paren la Mano' estaban debatiendo sobre el tema y sobre la cuota de responsabilidad que le cabe al que decide confiar en estos chantas.

Pero Rober Galati tomó la posta y contó algo que al parecer el resto de la mesa no tenía idea. Él mismo decidió confiar en el ahora presidiario por estafa, Leonardo Cositorto, con la confianza de que le reproduciría el dinero pero, obviamente, lo estafó. Cositorto, aún estando tras las rejas, sigue a la pesca de incautos que decidan regalarle su dinero.